Plaza de San Marcos, Basílica, Palacio Ducal

Verdadero corazón de la ciudad, la Plaza de San Marcos ha sido descrita por Napoleón Bonaparte como “el salón más bello de todo el mundo”; es la única de las plazas que se consideró tan importante como para ser llamada piazza, las demás se llaman todas campo.

Un salón que no ha cambiado a través de los siglos y que con justo orgullo muestra sus magníficos monumentos: la Torre del Reloj, los elegantes arcos de las Procuradurías, el campanario que los venecianos llaman “el dueño de la casa” que domina toda la ciudad, la deslumbrante Basílica, testigo de los enlaces entre Venecia y el imperio bizantino, Palacio Ducal, que fue la sede del poder de la República y residencia de sus gobernadores, además de máximo ejemplo de arquitectura gótica en Venecia.

Duración: mínimo 2 horas
Gastos extras: entradas a los museos

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